En Latinoamérica la demanda por electricidad no cede y su consumo debiese aumentar en 2,5 veces al 2050 (WEC, Consejo mundial de energía).
Es un sector que cuenta con grandes desafíos en la generación, transmisión y distribución de ésta. La creciente demanda de los consumidores y la importancia estratégica para el crecimiento económico y las empresas la hacen una industria foco donde se concentrará gran inversión en los próximos años. Ante esto, la industria energética debe manejar distintos factores como el uso de agua, calidad de aire, biodiversidad y ecosistemas acuáticos, paisaje, entre otros. Se suman a estos desafíos la salud y seguridad de los trabajadores y cumplimiento normativo y la mitigación de los riesgos operacionales.